La cifra, a nivel mundial, equivale a 10 millones de matrimonios infantiles al año. La mayoría son forzadas a contraer enlace con un hombre mucho mayor. Estos casamientos ocurren en África, Oriente Medio y el sudeste asiático
El matrimonio infantil, que roba la inocencia a millones de niñas de todo el mundo y a menudo las condena a una vida de pobreza, ignorancia y mala salud, es uno de los mayores obstáculos para el desarrollo, afirman grupos de derechos humanos.
Según la organización de caridad infantil Plan UK, "este es uno de los mayores problemas de desarrollo de nuestra era y nos comprometemos a elevar las voces de millones de niñas casadas contra su voluntad".
Desde horrorosas lesiones en el parto a la venta secreta de "novias de la sequía", las consecuencias del matrimonio infantil son exploradas en un documental multimedia de TrustLaw, un servicio de noticias legales dirigido por la Thomson Reuters Foundation.
"Cuando una niña tiene un bebé su vida se arruina, su educación se arruina", contó Kanta Devi, quien tenía 16 años cuando se casó en la aldea de Badakakahera en el estado Rajasthan en India. "Una se disgusta con todo en su vida", afirmó.
La Convención de Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño considera el matrimonio por debajo de los 18 años como una violación a los derechos humanos. Según el Centro Internacional de Investigaciones para la Mujer (ICRW), hay más de 50 millones de novias menores de edad en todo el mundo, un número que crecerá a 100 millones durante la próxima década.
Para los activistas seis de los ocho Objetivos del Milenio para el Desarrollo de la ONU están directamente ligados a la prevalencia del matrimonio infantil: la erradicación de la pobreza y el hambre extremas y la consagración de la educación primaria universal, la promoción de la igualdad de género.
El efecto dominó es devastador, según los expertos. Las niñas forzadas a casarse precozmente rara vez continúan con su formación, lo que les niega cualquier esperanza de independencia, la capacidad de ganarse la vida o de hacer un aporte económico a sus hogares.
Esta práctica además refuerza el concepto de las pequeñas como cargas sin valor sobre sus familias de las que hay que deshacerse tan pronto como sea posible.
En Níger, Chad y Mali, más del 70% de las niñas se casan antes de cumplir 18 años, según el análisis del ICRW de 2010 basado en datos demográficos y sanitarios. Bangladesh, Guinea, la República Centroafricana, Nepal, Mozambique y Burkina Faso tienen índices de más del 50%. Etiopía, Malawi, Madagascar, Sierra Leona, Camerún, Eritrea, Uganda, India, Nicaragua, Zambia y Tanzania están todos por sobre el 40%.
Las razones por las que los matrimonios infantiles ocurren varían según el país y rara vez son simples. "Muy a menudo la gente se apresura a demonizar, en ciertas formas, a los integrantes de la familia y a las personas que toman las decisiones", consideró a TrustLaw, Jeffrey Edmeades, un demógrafo social.
"Pero hemos hallado que, en mayor medida, la gente está tomando estas decisiones porque siente que es lo mejor para sus hijas. Los padres aman a sus hijos y quieren lo mejor para ellos. Solo que no saben qué es lo mejor", agregó.
En otros casos, las niñas son casadas precozmente para garantizar que su virginidad, y de este modo su valor económico en tanto novias, permanezca intacto y el honor de la familia esté protegido. Mientras tanto, deudas y desastres naturales, como tsunamis y sequías, pueden dar lugar a que muchas sean vendidas.
La Agencia Internacional para el Desarrollo de los Estados Unidos señaló que "las menores de 15 años, cuyos cuerpos todavía están desarrollándose y sus pelvis son aún angostas, son cinco veces más proclives a morir durante el embarazo o el parto que las mujeres de más de 20.
El Fondo para la Población Mundial considera al embarazo como la principal causa de muerte en ese grupo etario y menciona complicaciones en el parto y los abortos inseguros como los principales factores de riesgo, plantea el diaria América Infobae
Los hijos de novias menores de edad también están en riesgo. Los bebés tienen más probabilidades de tener bajo peso o nacer sin vida, indicó Plan UK.
Las niñas forzadas a casarse precozmente también corren un mayor riesgo de contraer enfermedades de transmisión sexual y sida porque es poco probable que puedan negociar tener sexo seguro con sus esposos.
"El matrimonio infantil es una emergencia sanitaria silenciosa en el sentido que a menudo es pasada por alto como la causa de raíz de la mortandad y morbilidad materna", afirmó Edmeades.
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