Desead, como niños recién nacidos, la leche espiritual no adulterada, para que por ella crezcáis para salvación.

1 Pedro 2:2

EL MAR ENSEÑA

El sonido del mar lo llena todo, es ruido de poder de Dios, ruido que demuestra su grandeza. Solo con oírlo vienen ganas de orar y de alabarle. Es que si Dios ha hecho cosas tan grandes y maravillosas como el mar, ¿cómo no nos va a ayudar a vencer cosas pequeñas, como nuestros líos? Los problemas que tenemos que enfrentar a diario, aunque nos parezcan muy grandes, son menores que el mar. Un Dios que estableció cosas tan poderosas y maravillosas, seguramente nos va a ayudar a vencer nuestros males.

Deberíamos anhelar que todo lo efímero, lo carnal y lo humano desaparezca ante el poder del Dios que cambia los corazones. Debemos anhelar como niños recién nacidos, la leche espiritual no adulterada; como dice la palabra de Dios, para que podamos tener cambios profundos. Tenemos que soñar, buscar, preparar y lograr ser buenos obreros, llenos del poder de Dios y de su temor. Llenos de temblor ante su presencia, no por miedo al castigo, o juicio, sino por reverencia. Por admiración, por ver sus maravillas, su creación, su provisión diaria, su poder. Que nada escapa a su presencia, que no hay ninguna cosa oculta que no haya de ser puesta de manifiesto a su tiempo.

Bendito sea el Señor por su creación, bendito sea el Señor por ayudarnos, por mover nuestras “estructuras” para que todo lo que esté edificado sobre arena se mueva y caiga cuando aún no es demasiado tarde para reconstruir. ¡Bendito sea el Señor!

LA BIBLIA DICE: Efesios 3:14-21

PARA PENSAR

Lo que Dios ha creado es muy espectacular, y tiene un mensaje implícito. Nosotros estamos y actuamos en medio de lo inmenso, de lo maravilloso, de lo sofisticado, de lo perfecto. No podemos pasar de largo sin hacer comentarios, no podemos vivir la vida sin alabar en verdad a Dios.

SUGERENCIAS

Lo que anheles en verdad, eso es lo que buscarás, y eso es también lo que Dios hará por ti. Pide, busca, llama, hasta que estés cara a cara con la palabra que te ayude a entender que en verdad Dios tiene un propósito contigo.

PARA LOS MÁS PEQUEÑITOS

Un niño recién nacido debe ser alimentado solo con leche materna, si le dan otra cosa, luego tiene muchas complicaciones y problemas de salud. Lo mismo le sucede a nuestro corazón cuando oímos cosas que no salen de la boca de Dios. Lo que no proviene del Señor nos hace mucho mal. Como creyentes, como hijos de Dios, necesitamos alimentar el corazón con su palabra: ¡Solo con ella y nunca con otros argumentos extraños!

Todo lo que Dios ha hecho es hermoso; ha preparado un lugar para que podamos vivir y disfrutar. Además, en su palabra está todo lo que necesitamos para vivir bien y triunfar cada vez que el enemigo venga para tentarnos.

Omar Gaitán